Los caramelos: el inicio de la historia de Vidal golosinas

¿A ti también te encantan los caramelos? Son un básico en todos los hogares, pero también en los bolsos o mochilas para llevar fuera de casa y endulzarte en cualquier momento. ¡Son geniales para matar el antojo de dulce y también para suavizar la garganta! 

Pero seguro que no sabías que los comienzos de la trayectoria de Vidal Golosinas fueron con este dulce: el caramelo duro. En apenas 70 metros cuadrados se comenzaron a elaborar los primeros caramelos de forma artesanal a principios de los años 60. En esta época se producían hasta 500 kilos diarios de caramelo duro con moldes y se envolvía de forma manual. 

Muy pronto fue necesario ampliar las instalaciones y se adquirió la primera máquina para la elaboración de caramelo duro con palo, que tuvo un gran éxito entre todos los consumidores. Además, estos caramelos con palo se empezaron a vender junto con un globo como obsequio que encantó a niños y mayores.  

Caramelo duro - Vidal Golosinas

El regalo junto con el dulce se convirtió en una tradición y, más tarde, tanto las primeras golosinas como todos los caramelos iban acompañados de juguetes o calcomanías que alegraban las tardes de los pequeños. 

 

Cómo se hace el caramelo duro  

Para elaborar estos caramelos, el método tradicional es el de calentar a muy altas temperaturas azúcar o endulzante junto con agua, para después agregarle colorantes y extractos de frutas, plantas u otro saborizante para darles el color y sabor deseado. 

Es entonces cuando se vierte la mezcla en el molde para darles la forma deseada, bien de caramelos duros o bien caramelos con palo. Después, esta mezcla se enfría para solidificar el caramelo y se les coloca el envoltorio individual. 

 

Un caramelo perfecto para cada ocasión 

Existen infinidad de posibilidades para crear caramelos con diferentes colores y sabores, cada uno de ellos pensado para momentos en concreto. Te contamos todos los tipos de caramelos para que elijas el que más se adapte a ti. 

 

Caramelos sin azúcar  

A diferencia de los caramelos habituales que se fabrican con azúcar, los caramelos sin azúcar no contienen grasa y son una alternativa perfecta para endulzarte sin sumar calorías, pero con sabores intensos y refrescantes. 

En muchas ocasiones, cuando nos resfriamos o se nos irrita la garganta, una buena opción es tomar caramelos para la tos, ya que son de mucha utilidad para calmar el malestar y la sensación áspera en la boca. Los caramelos balsámicos son de gran ayuda para suavizar y refrescar la garganta. En Vidal contamos con diferentes tipos de caramelos sin azúcar de nuestra gama Mells con sabores frescos como el eucalipto, el mentol y el limón, ideales para cualquier ocasión. 

Vidal Golosinas - Caramelos Mells

Aunque si prefieres sabores más cremosos, la línea LaCrême es la más indicada para ti con sus irresistibles sabores a fresa y nata, toffee o café con recetas originales que se fundirán en tu boca y te dejarán un intenso e inconfundible sabor. ¿Lo mejor de ellos? También son sin azúcar. 

 

Caramelos con palo 

Si piensas en caramelos con palo seguro que lo primero que se te viene a la mente es un niño. Esto es porque este tipo de caramelos es el favorito de los peques y no falta en ninguna bolsa de chuches de cumpleaños o de cualquier tarde jugando con sus amigos en el parque. 

Además, los caramelos con palo suelen ser los primeros dulces que comen los niños cuando aún son pequeños, ya que pueden sujetarlo con sus manos y son más seguros que el caramelo duro suelto.  

Existen infinidad de sabores y posibilidades: con pica como nuestros Palipica, con chicle, de doble sabor e incluso pintalenguas para divertir las tardes de los más pequeños en cualquier fiesta.  

 

¿A qué esperas para buscar tu caramelo perfecto y unirte a la historia de Vidal?